Conoce los siguientes remedios caseros para quitar las várices, los cuales pueden acompañar el tratamiento médico que sigas para eliminarlas.
Su aspecto y las molestias que causan no suelen ser agradables. Las várices son resultado de problemas circulatorios en el cuerpo debido a distintos factores. Existen diversas alternativas para su tratamiento, las cuales siempre deben ser recetadas y controladas por un médico. Sin embargo, existen ciertos remedios que pueden ser usados a la par de un tratamiento profesional. Por ello es que te damos a conocer algunos remedios caseros para quitar las várices, que te servirán para sentirte mucho mejor.
¿Qué son las várices?
Várices es el nombre informal para referirnos a una condición conocida como insuficiencia venosa crónica. Las várices suelen salir con mayor frecuencia en las piernas y su aspecto es el de una red de venas inflamadas y de color azulado. Suelen causar molestias en quienes las padecen.
¿Por qué salen várices?
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Esto es debido a una condición llamada insuficiencia venosa, la cual se refiere a la incapacidad de las venas de las piernas para retornar la sangre hacia el corazón. Esto provoca un aumento de sangre dentro de la pierna que hace que las venas se dilaten y puedan hacerse visibles.
Hablando de manera mucho más precisa, las várices son resultado de la disfunción en las válvulas venosas, unas estructuras en el interior de las venas que permiten que el flujo de la sangre sea siempre en sentido ascendente (de las piernas en el corazón).
Además de ello, podemos mencionar otros factores de causa como la edad, la genética, el sedentarismo y el sobrepeso.
Remedios caseros para quitar las várices: ajo
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Este producto de uso común en casa tiene propiedades antiinflamatorias, anticoagulantes y vasodilatadoras que ayudan a mejorar la circulación sanguínea, que como ya vimos es lo que provoca la aparición de las várices.
Debes preparar una pasta con dos dientes de ajo machacado y una cucharada de aceite de oliva. Después debes aplicarla en la zona donde tengas várices dando un suave masaje durante un cuarto de hora. Por último, retira la pasta con agua tibia o fría.
Vinagre de manzana
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El vinagre de manzana es otro de los productos que pueden darnos diversos beneficios. Y ello se debe a que es un producto con grandes cualidades para promover la buena circulación de la sangre en nuestro cuerpo.
La manera más sencilla de usar este remedio es que sumerjas tus piernas en un balde grande de agua tibia con 1 vaso de vinagre de manzana y un puñado de sal gruesa durante media hora. Una vez dentro, debes masajearlas de manera suave.
En el caso de que tengas várices en puntos localizados y que no sean muy grandes, puedes aplicar compresas de agua tibia con vinagre precisamente en esas zonas donde se encuentran las várices. Masajea la zona afectada.
Lee más sobre cómo usar vinagre de manzana para las várices.
Aloe vera
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Muchas personas recurren a las propiedades de esta planta, ya que tiene un efecto antiinflamatorio, calmante e hidratante para la piel. Puedes aplicar directamente el aceite esencial de aloe vera en las zonas donde tengas várices por medio de un suave masaje, durante 10 a 12 minutos.
Otra forma de hacerlo es que mezcles este aceite esencial con tu crema de uso diario y la apliques como lo haces de manera regular, siempre dando masaje a las venas que lucen inflamadas.
Recuerda que estos remedios jamás van a sustituir la consulta de un médico. Él es el único autorizado para dictaminar tu estado y darle seguimiento.
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