¿Sabías que tu esponja de cocina puede guardar una infinidad de bacterias? Por eso te compartimos cómo la puedes lavar y desinfectar adecuadamente.
Uno de los artículos de cocina que usamos diariamente es la esponja: ya sea para lavar los platos, limpiar el fregadero o tallar la estufa. Esto la convierte en el artículo que más almacena bacterias en todo tu hogar.
Según el Instituto de Medicina de Precisión de la Universidad Furtwangen y Justus Liebig University Giessen, en Alemania, las esponjas para trastes son el segundo objeto que más aloja microorganismos, sólo después de los desagües.
Suena bastante sucio, ¿no crees? Pues este dato te sorprenderá aún más: la cantidad de bacterias que se encuentra en las esponjas corresponde con 7 veces al número de habitantes en la tierra. ¡Este es el mismo número que contienen las heces!
La principal señal de que tu esponja acumula un gran número de bacterias, es que despide un desagradable olor. Por eso, hoy te queremos mostrar cómo lavar y desinfectar las esponjas de manera correcta para que estés seguro de no padecer infecciones. ¡Toma nota!
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Según estudios, la esponja para trastes tiene más bacterias que un desagüe. Descubre cómi desinfectarla. (Foto: Getty Images)
En primer lugar, después de usar la esponja, aplica sobre esta un poco del jabón líquido que usas para lavar los trastes y luego enjuaga con abundante agua hasta que no haga espuma.
Luego, escúrrela sobre una rejilla y deja secar por completo para evitar que las bacterias se puedan reproducir.
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Por otro lado, puedes desinfectar con un poco de lejía: sumerge la esponja en una mezcla de agua que contenga 10% de lejía. Deja reposar unos minutos y retira y enjuaga con abundante agua.
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Finalmente, el jugo de limón resulta un gran desinfectante:
Agrega el jugo de un limón en 2 tazas de agua caliente. Remoja la esponja durante 20 minutos. Enjuaga con agua fría y jabón líquido hasta que deje de hacer espuma y deja secar.