¿Se te antoja el pozole de garbanzo? Dale una oportunidad y deja que tu paladar tenga la última palabra. Sin duda te va gustar muchísimo, además siempre es bueno probar nuevos sabores de vez en cuando, ¿no crees?
Dependiendo del lugar donde te encuentres, podrás hallar diferentes formas de prepararlo. Si visitas el estado de Guerreo, Jalisco, Sonora, Sinaloa, Guanajuato y Nayarit, no dudes en probar el pozole y saborear los distintos estilos.
Según información del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM , el pozole data desde la época prehispánica. Se trataba de una comida ritual que entre sus ingredientes se encontraba la carne de los prisioneros de guerra.
Con la llegada de los conquistadores españoles, el pozole dejó de ser un platillo ritual, pero siguió siendo importante en las celebraciones populares. La carne humana fue prohibida y se empezó a usar carne de puerco, guajolote y pollo.
Podemos encontrar casi 20 versiones de este platillo en todo México. La base de todos es prácticamente la misma: preparar un caldo con maíz cacahuacintle, hervir otro rato con carne o sustituto, a veces pintarlo con chile guajillo o ancho y aderezarlo con muchas cosas, desde cebolla y lechuga o col hasta chicharrón, huevo y sardinas.
Pozole significa espuma en náhuatl. Esto se debe a que, al prepararlo, los granos del maíz se abren de modo que parecen espuma cuando comienzan a hervir.
La base del pozole es el cacahuacintle. Estos granos son precocidos en una solución ligera de agua con hidróxido de calcio (cal). A este proceso se le conoce como nixtamalización (el mismo proceso utilizado para elaborar la tortilla).
¿Te quedó claro cómo hacer el pozole de garbanzo? Compártenos qué tal te quedó.
¡Buen provecho! Conoce más recetas de pozole en Cocina Fácil