Yo soy de las personas que no puede comenzar su día sin una buena taza de café caliente, y estoy segura que tú tampoco. Sin embargo, hace unos meses, y sumado al cambio de la rutina diaria en la que influyó la pandemia, mi bebida favorita comenzó a alterar mi descanso por las noches, provocando que en las mañanas me sintiera más cansada, tomara más café y se volviera un círculo vicioso.
Pero todo volvió a la normalidad cuando conocí unas pautas para tomar café sin que me robara el sueño. Hoy te las quiero compartir porque son realmente efectivas.
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Cómo tomar café sin que altere el sueño
SENSIBILIDAD A LA CAFEÍNA
Café (Foto: Getty Images)
¿Sabes qué tan sensible eres a la cafeína? Estas es una sustancia que afecta en diferente grado a las personas, y es la que inhibe los receptores del cuerpo que se encargan de administrar los ciclos de sueño y vigilia.
En el caso de las personas sensibles a esta, con tomar sólo una taza diaria será más que suficiente para toda la jornada.
Sin embargo, las personas que han desarrollado la tolerancia de la cafeína, pueden permitirse una mayor cantidad.
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PONLO A RITMO
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Dependiendo del ritmo circadiano, lo que ingieras a una hora puede tener un efecto u otro. Expertos indican que lo mejor es tomarlo dos horas después de despertar, cuando desciendan los niveles de cortisol.
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NADA CON EXCESO
Café (Foto: Getty Images)
Según expertos, la dosis de café diaria está entre los 100 y 300 mg de cafeína y, por máximo, 500 mg.
Por encima de esta dosis, los beneficios que tiene pueden transformarse en problemas que derivan en trastornos de sueño, hiperactividad, dolor de cabeza e incluso alteraciones del ritmo cardiaco.
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ALTERNAR TIPOS DE CAFÉ
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Finalmente, otra clave es variar las cantidades de cafeína en la bebida preparando distintos tipos de cafe, y con diferentes ingredientes, para aminorar el impacto de la cafeína en nuestro organismo.